El método IPLER es un proceso de lectura autorregulada, su nombre viene de las iniciales de los siguientes conceptos; Inspeccionar, Preguntar y predecir, Leer y valorar, Expresar, Revisar y consolidar.
Algunos autores lo presentan como Iniciar, Preguntar, Leer con intencionalidad, Escribir sobre lo leído, Repetir el texto con palabras propias y Recuperar lo aprendido. Lo cierto es que presenta tres etapas fundamentales:
Ø Antes de la lectura
Ø Durante la lectura
Ø Después de la lectura
Antes de la lectura
Inspeccionar
No es ajeno para los lectores, que la primera acción al querer realizar una lectura es observar su título y a partir de él formar una idea global de su contenido. Esta necesidad de saber la temática de las lecturas sin aun haber realizado la lectura se le llama inspección (es una necesidad nata de todos los seres humanos a la cual se le denomina curiosidad). Sin embargo no siempre el título satisface dicha curiosidad, así, que para realizar una inspección que genere mejores resultado se deben tomar en cuenta los siguientes pasos:
Ø Leer los títulos y subtítulos.
Ø Leer el resumen, si lo tiene.
Ø Leer las primeras oraciones de cada párrafo.
Ø Lea las palabras principales en el glosario
Preguntar
Como se mencionaba en el paso anterior el ser humano nace con una gran dosis de curiosidad, la cual generalmente se expresa a través de interrogantes como: ¿Qué? ¿Por qué? ¿Para qué? ¿Quién? ¿Dónde? ¿Cuándo? Entre otros.
Este hecho se puede aprovechar para aumentar la motivación en la realización de una lectura, al plantear inquietudes que quisiera manifestar al autor del texto, para ello puede transformar los títulos y subtítulos en preguntas, leyendo el
cuestionario si el texto lo tiene, o auto interrogarse sobre qué tratará la lectura, basándose en la portada o las imágenes.
La formulación de preguntas debe hacerse rápida, pero seriamente ya que plantear preguntas proporciona objetivos inmediatos sobre lo que hay que investigar o aprender, despierta la curiosidad, estimula la atención, favorece la concentración y junto con la etapa de inspeccionar constituyen las dos puertas ineludibles para una correcta entrada al tema.
Durante la lectura
Leer con propósito
Se dice leer con propósito por qué se tiene dos intenciones fundamentales la percepción y la comprensión mental. La eficacia de la lectura depende del equilibrio que se tengan entre las dos.
Para desarrollar este paso con eficiencia se debe leer pensando en responder las preguntas planteadas con anterioridad, se debe leer todo hasta el final de cada sesión, analizando párrafo por párrafo para identificar las ideas principales y secundarias (se pueden subrayar), se debe dedicar el tiempo suficiente, pues, si se hace una lectura rápida no se puede garantizar una buena comprensión. La velocidad en la realización de las lecturas se va mejorando a medida de la constante práctica.
Expresar lo leído
Es la habilidad para construir nuevas relaciones, establecer nexos, resaltar ciertos conceptos de acuerdo con la tarea que va a desarrollar. En otras palabras, es la capacidad de reproducir el contenido de la lectura con palabras propias, lo cual puede ser de forma escrita (mediante un ensayo, resumen, mapa conceptual, etc.) o de forma oral (fortaleciendo la fluidez verbal y la ampliación del vocabulario)
Después de la lectura
Revisar
La finalidad de este paso es recordar el contenido de lo leído para emplearlo en el momento oportuno.
Esto se puede logra con los apuntes de trabajo para refrescar la memoria sobre los puntos, hacer predicciones respecto de las posibles preguntas de la evaluación. Conviene además cuestionar todo lo estudiado y proyectar los conocimientos aprendidos hacia la aplicación práctica.
Ventajas y desventajas del método IPLER
Más que hablar de ventajas y desventajas de este método, prefiero utilizar el concepto de impacto, el cual varía según las edades de los estudiantes, se preguntaran del porqué de ello, la respuesta es muy simple.
Si el método IPLER se desarrolla en la práctica con niños pequeños digamos que entre las edades de 6 a 10 años, se puede aprovechar la creatividad e imaginación con la que cuentan para fortalecer los dos primeros pasos y a la vez el amor por la lectura y escritura a través de la lúdica. El tercer paso debería realizarse de dos maneras; individual y colectivo para explorar y desarrollar otras habilidades como el trabajo en equipo. El cuarto paso no tendría modificaciones y el quinto deben emplearse estrategias que motiven al estudiante a participar o trabajar en equipo, como juegos de memoria competencias y demás, diseño de sopas de letra con palabras claves, crucigramas, en fin.
Es proporcionaría que al llegar a una edad más adulta no tengan dificultad para manejarlo.
Si el método se utiliza con chicos en la etapa de adolescencia por primera vez, se debe ser audaz para poder indicarles los beneficios de este mediante la práctica , dado que a esta edad tienen otras prioridades en su mente como ver la tv, jugar Xbox, estar en chat , más no dedicarle tiempo a la lectura.
Una de las estrategias que se pueden emplear es que los docentes en sus clases busque n lecturas relacionadas con las temáticas que está viendo y a la vez de interés para los chicos si son de actualidad mucho mejor. Durante la clase practicar el método por grupos y dejar que ellos vean por si mismos las ventajas del mismo.
Como conclusión, puedo afirmar que el método IPLER al emplearlo de forma adecuada proporcionaría múltiples beneficios o ventajas , pero que si utiliza de manera incorrecta podría dejar más inquietudes que certezas sobre la temática a estudiar.